Entrevista al GM Elizbar Ubilava
Por Daniel Perchman
06/2020
“Es una lástima que no se haya jugado el match Karpov contra Fischer, creo que pudo haber sido uno de los mejores matches de la historia”
“Kasparov jugó esa partida con una rapidez increíble, con una preparación fantástica, y ganó esa partida; aunque solo pudo empatar en ese momento el match, el efecto psicológico fue impresionante, jugó en siete minutos las veinticinco o veintisiete jugadas y eso afectó muchísimo a Vishy” (Sobre la décima partida del match de 1995)
Sus padres querían que fuera músico, en un momento pensó en seguir el camino de la filosofía y se dedicó a ello con pasión. Por suerte para Anand, Karpov y la infinidad de jugadores que ha entrenado, su amor por el ajedrez volvió con más fuerza e hizo de este juego su vida.
Cada tema, cada detalle, lo describe desde una mezcla de razón y sentimiento. Habla de los triunfos y las derrotas con emoción.
Como si nos conociéramos de toda la vida, sin prisa me habló más de treinta minutos de su vínculo como entrenador del extraordinario Vishy Anand. De cómo prepararon aquel famoso match en las torres gemelas de New York en 1995. Qué aspectos fuertes y débiles tenía el genio hindú. De la relación de este con Kasparov y de la trastienda de aquella décima partida decisiva en la que el genio de Bakú logro imponerse y empatar el match de forma transitoria.
Nos cuenta detalles del Anatoly Karpov que conoció en las competencias soviéticas siendo ambos apenas adolescentes, y del jugador consagrado enfrentando a Kasparov en Sevilla. Confiesa los entretelones, qué ocurrió y qué pensaron en aquella última partida suspendida, en la que alcanzaba con empatar a Karpov para ser campeón y terminó derrotado.
Pasamos por cada uno de los escaques blancos y negros de su vida, que han sido muchos más que sesenta y cuatro.
Pudo ser músico y seguramente hubiera sido un gran intérprete de los cantos gregorianos que lo emocionan hasta las lágrimas. En un momento se direccionó a la filosofía, y no hay duda alguna, hubiera dirigido la cátedra de alguna gran universidad en el mundo. Tengo la certeza que este hombre sería un grande en cualquier actividad que se hubiera propuesta. Por suerte para el ajedrez, el maestro Ubilava ha tomado este camino maravilloso.
Por suerte para mí, qué he tenido el placer de escucharlo y compartir con él estas horas.
- ¿Cómo era la infancia de un niño en Georgia en los años cincuenta?
¡Debo decir que mi infancia recuerdo como muy feliz! Mis padres han tenido cuatro hijos. Yo siempre he tenido una atención especial, porque era el menor de los cuatro. Desde siempre tomaba cosas muy en serio y los elogios que recibía me hacían más responsables todavía para cumplir las esperanzas que depositaban en mí. Por supuesto había muchos problemas en los años cincuenta en el país, pero nosotros vivíamos en nuestro mundo feliz.
- Recuerdo que un gran entrenador de fútbol hablaba de la genética del futbolista. Explicaba que difícilmente Messi o Maradona podían haber nacido en Malí. ¿Hay algo de esto en ajedrez, o podemos tener confianza que un Kasparov nazca en Uruguay?
Por supuesto es más fácil que un gran jugador de ajedrez aparezca en la Unión Soviética, por la atención, la propaganda, la inversión y la cultura para desarrollar este deporte, que hacia la Unión Soviética desde los años veinte hasta su desaparición que en otro país, aunque Fischer nació en USA, Anand en India y Carlsen en Noruega. Sin embargo ningún país podía producir tantos grandes jugadores como la URSS. Un genio puede nacer en cualquier país, aquí no hay reglas.
- ¿Cuándo se inició su pasión por el ajedrez? Y si se acuerda, me gustaría que me contara cuál fue el primer juego propio que tuvo en sus manos
Me acuerdo muy bien la primera vez que mi padre trajo el tablero de ajedrez con las piezas y a los cuatro hijos nos enseñó las reglas de juego. Yo tenía 6 años. Desde el primer momento, para mí, ajedrez se convirtió en un juego mágico. ¡Fue un flechazo! Cualquier persona que venía a nuestra casa le pedía jugar ajedrez conmigo, no sólo eso, me gustaba jugar con las piezas de ajedrez fuera de tablero también, las piezas eran mis muñecas. En casa organizábamos los torneos de ajedrez con todos los miembros de familia excepto mi madre. Lamentablemente mis padres querían que yo fuera músico, me llevaron a una escuela de música donde empecé estudiar el violín. He sufrido mucho durante cuatro años porque quería el ajedrez, finalmente mi padre comprendió hasta qué punto estaba enamorado en ese juego y me permitió dejar la música y me llevo a un club de ajedrez. En aquel entonces tenía diez años, donde empecé estudiar y jugar el ajedrez.
- Usted ha sido entrenador de muchos jugadores y jugadoras que han marcado la historia del ajedrez. Me gustaría que mencione para el lector algunos de los nombres más relevantes.
Cómo entrenador empecé trabajar muy temprano, con 24 años. Eso fue por una necesidad de ganar algo más de dinero. Mi primera alumna fue Nana Ioseliani, quien consiguió éxitos extraordinarios en la edad muy temprana, fueron frutos de nuestro trabajo conjunto. Durante muchos años trabajé con Nona Gaprindashvili, después Anatoly Karpov, Viswanathan Anand, Mamedyarov… Entrené equipos olímpicos de India, ahora estoy trabajando con el equipo femenino de Georgia, tengo otros alumnos en paralelo…
- Dígame un aspecto en el que disfruta jugando y uno en el que lo hace entrenando.
Para mi jugar el ajedrez es competir con el resto del mundo, luchar y demostrar que vales, la pasión y ambición se juntan. ¡Quizás suene muy radical, pero luchando tú defiendes tu personalidad, incluida la propia vida!
Cuando empecé entrenar prevaleció la responsabilidad por el trabajo que estás haciendo, también es muy importante las relaciones personales fuera de tablero, cada término y conducta tiene consecuencias. Debes comprender a tu pupilo, adaptar el conocimiento y trabajo de manera adecuada y por supuesto ser leal y sincero con la persona con quien estás trabajando.
- Relacionado con la pregunta anterior en su rol de entrenador. Los seres humanos somos en muchas ocasiones egoístas. Sin embargo, intuyo que usted quizás disfrute una buena partida y victoria de un discípulo igual o más que la propia.
En la etapa actual son mucho más importante los resultados que consigue tu pupilo, Sobre todo las victorias que consigue durante las partidas de alto voltaje y con un contenido fuera de lo común.
- Mi amigo Daniel Rivera me envió en una ocasión un excelente artículo de “Torre64” sobre la Reina Tamara, quien gobernó Georgia en el período entre 1184 y 1213 y era aficionada al ajedrez. El mismo explicaba que fue una de las grandes promotoras de la igualdad de géneros, y además de promover la práctica entre hombres y mujeres ordenó que toda dote nupcial debía tener su juego de ajedrez.
¿Cuál es a su juicio la explicación de la fortaleza del ajedrez femenino en su país?
¿Encuentra alguna razón para que hasta el momento una mujer no haya logrado ser campeona absoluta del mundo?
Esta pregunta sobre la Reina Tamara es importante. Ella fue muy admirada en su época en general y por el pueblo georgiano en particular. Esa época, de los siglos X, XI y XII, están reconocidos como los siglos dorados de Georgia. Como nación se había convertido en un país muy poderoso, muy desarrollado. Además tenía un nivel muy alto la cultura, la literatura, la ciencia, la traducción, estaban trabajando los traductores más importantes en la traducción de la biblia, tras haber viajado a Israel.
Sobre la igualdad que hablas, eso está descripto muy bien en el poema del genial poeta georgiano Shota Rustaveli, que fue traducido al español sino me equivoco como: “El caballero en la piel de tigre”. Son ideas muy reconocidas y muy avanzadas para la época sobre la igualdad entre la mujer y hombre. Además ese poema está reconocido como una de las más profundos, más épicos y más filosóficos. Fue una época muy relevante en el estado de Georgia.
Sobre el tablero de ajedrez dentro de la dote nupcial, es una leyenda muy utilizada en Georgia, pero yo no puedo asegurar que esto surgió como deseo de la Reina Tamara.
Sí mencionamos hace mucho tiempo que el ajedrez femenino es muy popular, porque en la pareja al contraer matrimonio, la mujer llevaba el tablero a casa de su marido.
Sobre el último aspecto de la pregunta, me cuesta creer que en las próximas décadas pueda ocurrir que una mujer sea campeona del mundo absoluta ganándoles a los hombres. Claro, en general podemos imaginar de todo, puede aparecer una mujer genial que puede superar a los hombres en velocidad de pensamiento, capacidad estratégica, conocimiento, etc. Pero si lo vemos en un período observable creo que es imposible.
- ¿Qué relación hay entre la personalidad de un jugador con su estilo y su forma de jugar?
Sin duda alguna la forma de jugar representa lo que él es, a su personalidad. No puede ser de otra forma porque sus conocimientos, sus conceptos, que no se ven de forma directa, pero desde luego lo que hace en el tablero es lo que representa como persona.
Mirando las partidas de un jugador tú puedes entender quién es este jugador, muestra su genialidad y su locura en las partidas. No existe estilo de juegos iguales, aunque podamos decir que Fischer, Kasparov, Krámnik y Anand son jugadores activos, pero es muy genérico por cierto, cada uno tiene su punto de vista muy subjetivo, muy personal y hay una diferencia clarísima.
Psicológicamente el estilo de juego representa a un jugador de una forma clara. Hoy en día nadie busca descifrar la personalidad de un jugador de ajedrez a través de sus partidas, pero creo que si nos empeñamos en hacerlo lo podemos lograr.
Ahora, cuál es la diferencia entre un estilo y otro. Yo creo que hay una clara diferencia entre los que pueden reflexionar rápido y los que no pueden hacerlo. Sin embargo tienen una profundidad de entender la posición y marcar los planes estratégicos, entonces aquí la rapidez ya no sirve tanto. El ajedrez no es solo un juego de cálculo, es un juego conceptual, un juego estratégico. Entonces los jugadores como Emanuel Lasker, Botvinnik, Spassky, también fueron campeones del mundo, pues sus estrategias tan profundas y absorbían esos planes. Mirando hoy en día algunas partidas de Botvinnik puedes encontrar los mismos planes e ideas, pues eran universales.
Uno puede ser campeón del mundo con cualquier estilo.
Debo decir que una parte muy importante es la intuición. Hay posiciones nada claras, entonces la brújula de la intuición es vital. Es como en la vida, muchas veces actuamos intuitivamente, sin tener ninguna pista. Nuestro conocimiento es también el que nos hace distinguir el bien del mal.
- Me gustaría que me hable de Anand. Todo lo que se pueda, sin ser indiscretos. Hablo, dentro y fuera del tablero.
Sobre Vishy Anand, te cuento un poco la historia de cómo nos hemos juntado. En el año 1993 traje a mi familia a España primero a Oviedo y después de un año nos hemos trasladado a Collado Mediano cerca de Madrid.
El venía mucho a esa región pues tenía muchos jugadores amigos que lo ayudaban en su preparación. Gente muy amable, Mauricio y Nieves Perea. Allí comenzó nuestra amistad y preparación conjunta. Aunque el primer contacto fue su invitación para ayudarlo a prepararse a jugar contra Gata Kamski. Vishy estaba participando en dos campeonatos del mundo en ese entonces. Por un lado estaba el ciclo de F.I.D.E, y por otro lado el de la GMA que se formó porque Kasparov tenía problemas con la Federación Internacional, con el apoyo del financiero belga Bessel Kok.
Vishy estaba muy fuerte ya, y competía en las dos series.
Como te decía, el primer match que debía jugar era contra Kamski en la ciudad India Sanghi Nagar. Este match empezó muy bien para Anand, en el medio juego era muy superior, iba venciendo 3 ½ a 1 ½ y después en forma difícil de explicar tuvo un traspié y perdió, también cayó en la última y el match quedó empatado en 4 puntos y Kamski se impuso en el desempate de las partidas adicionales.
Ahora se notaba que su calidad de juego, su medio juego era estupendo, se notaba que estaba creciendo como jugador de ajedrez. Aunque perdió el match y era nuestra experiencia, me ofreció trabajar con él para el resto del año y para el futuro. Yo acepté con mucho gusto. Trabajábamos cinco días a la semana y yo lo acompañaba en todos sus torneos y me convertí en su entrenador personal. Debo decir que cuando empecé a trabajar con él me preguntaba cómo podía satisfacer sus demandas. Él era un jugador súper rápido y a una idea que se me ocurría y yo le ofrecía el me respondía enseguida o tenía tres o cuatro respuestas. En esos primeros días tuve dudas, pero después me acostumbré. Lo más importante no es trabajar rápido sino elaborar ideas que el pudiera emplear en sus próximas partidas. La verdad es que yo siempre tuve ese interés muy especial de cambiar las ideas en las aperturas, descubrir algo, intentar mover la teoría. Eso era muy útil para Vishy, pues tenía un nivel muy alto y lo que le faltaba era realmente eso, tener nuevas ideas y trazar direcciones diferentes para sorprender a los oponentes. Es vital al nivel muy alto contra los mejores, hay que estar preparado con algo nuevo porque si no, no puedes conseguir nada.
Yo estaba muy feliz trabajando con él, era una persona muy disciplinada, muy razonable, siempre apuntaba hacia adelante. Realmente todo iba muy bien. Ha ganado muchísimos torneos y eso claro te da más estímulos y confianza.
En cuanto a la parte económica, él se financiaba a sí mismo, lo que era muy complicado, había que pagar el trabajo del entrenador, sus viajes, y él en ese sentido era muy generoso porque la federación de India no estaba en buenas relaciones con Anand y no lo apoyaba, por eso estaba tanto tiempo en España y se hizo residente.
Cuando se forja ese tipo de amistad, de relación de colaboración y de trabajo, cualquier detalle importa mucho dentro y fuera del tablero. Íbamos al gimnasio junto, se formó una relación muy estrecha. Claro que no todo era perfecto, hubo cosas a superar pero las cosas positivas fueron muchas más.
En el año 1995 en New York se jugó el match por el campeonato mundial contra Kasparov. Yo era el entrenador principal pero también lo apoyaban otros jugadores, Speelman, Yusupov y Patrick Wolff.
Debo decir sobre este match que no tuvimos mucho tiempo para hacer una preparación especial contra Kasparov, que en esos tiempos era como un Dios de ajedrez, dominaba no solo por su juego sino también por su personalidad muy dominante y muy fuerte. No solo había que realizar una preparación ajedrecística, sino que había que enfrentar a una persona que iba por ti, este concepto soviético que un oponente se convierte casi en un enemigo. Sin embargo Vishy y Kasparov se llevaban bastante hasta cierto punto, después claro cada uno tenía sus intereses.
Durante este match preparamos muchísimo acá en Collado Mediano. Con blancas hemos preparado contra su arma más importante “Siciliana Najdorf” y creamos bastantes ideas y Anand tuvo bastante éxito jugando con blancas, ganó la novena, pudo ganar incluso la tercera, pero se desvió y al final fue tablas. La primera parte se hizo bastante bien, en las primeras nueve partidas no se había perdido ninguna con una victoria, algunas novedades e ideas funcionaron muy bien. Sin embargo la décima era la clave, ahí Kasparov encontró una novedad en la variante que nosotros jugábamos con negras, y estábamos con negras bastante vulnerables porque no tuvimos el tiempo de prepararnos bien.
Kasparov jugó esa partida con una rapidez increíble, con una preparación fantástica, y ganó esa partida; aunque solo pudo empatar en ese momento el match, el efecto psicológico fue impresionante, jugó en siete minutos las veinticinco o veintisiete jugadas y eso afectó muchísimo a Vishy. Tuvo buenas oportunidades con negras cuando jugó una “Escandinava”, pero perdió esa también y el match ya estaba perdido. La presión psicológica que es invisible de alguna forma, me parece que Vishy siempre sufrió de parte de Kasparov, por lo menos en este match no lo hemos podido superar. Cuando en el año 2000 Krámnik le ganó a Kasparov, él me dijo en forma sarcástica: “Solo había que hacer eso para ganarle a Kasparov”.
Anand es un jugador que podía jugar cualquier posición en la dirección correcta, eso solo es posible encontrar en los jugadores que tienen mayor talento e intuición más profunda, como Capablanca, Fischer, Kasparov, Carlsen y algunos más.
Es muy amistoso, le gusta mucho el humor y a la vez es una persona que cuida mucho su intimidad, no le gusta que mucha gente sepa los detalles de su vida diaria.
Su estilo es clásico activo posicional, es fantástico cuando tiene la iniciativa y es muy bueno en defensa.
Cuando se casó con Aruna, ella se convierte en una persona muy importante, que lleva sus asuntos y toma esa parte más complicada y ha jugado un papel muy importante, una persona muy intelectual muy amable, es una pareja de alto Handy. Él siempre me decía que cuando tuviera un hijo iba a volver a India para que se críe allí y eso hizo.
Nosotros hemos trabajado juntos hasta el 2004, aunque en el 2002 yo me sentía muy cansado, solo me dedicaba a este trabajo. Nunca la relación entrenador y pupilo termina en forma normal, siempre prevalecen aquellos pequeños detalles que en su momento no tienen importancia pero crece algo que no puedes controlar, aunque ganes muchos torneos y suficiente dinero, esos detalles dejan huellas y te impiden trabajar en forma normal.
Yo anuncié a Vishy que quería descansar y eso fue muy inesperado y se enfadó mucho, dejamos por algún tiempo, cuando reanudamos después de un año ya no era lo mismo.
Cuando dejó de trabajar conmigo empezó a trabajar con Peter Heine Nielsen y fueron esos años muy fructíferos con todos los títulos del mundo y ha mantenido esa personalidad admirable y reservada.
Nosotros mantenemos muy buenas relación y tenemos oportunidad de vernos cada tanto. Creo que tiene muchos años más en la élite del ajedrez. Él en India es una leyenda, una de las grandes estrellas de este enorme país.
- Ahora pasemos al gran Anatoly Karpov, la pregunta repetida.
Tenemos casi la misma edad por lo tanto empezamos jugando las mismas competiciones. Recuerdo que una de las primeras veces que nos enfrentamos, yo tenía quince años y el catorce, yo sacrifiqué una calidad sin tener claras las consecuencias y en los análisis me di cuenta que él tenía una comprensión mucho mayor que la mía de la posición. Siempre he sido un admirador de su comprensión y su genialidad.
Cuando me pidió para trabajar con él fue una gran felicidad. Esto fue antes de su primer match con Kasparov. Él quería trabajar conmigo ciertas aperturas que yo jugaba con frecuencia. Yo le conté mis dudas, mis logros en diferentes posiciones, recuerdo la apertura de “Nimzo” con “Cf3”, yo pensé que él quería prepararse para jugar con blancas pero en realidad era para defenderse con negras, mis temores de que esa apertura era difícil para defenderse con piezas negras se cumplieron, el perdió una y empató otra.
Yo estaba como analista de Karpov contra Sokolov en Linares y ahí ganó con gran diferencia. Andrei era un jugador que con iniciativa era muy peligroso, pero Karpov se defendía muy bien, su evaluación siempre era muy profunda y como calculaba más que Sokolov ganó muy fácil ese match.
Después me invitó a trabajar en el match de Sevilla, contra Kasparov donde el entrenador principal era Igor Zaitsev, muy inteligente, muy creativo, su contribución en el match contra Korchnoi había sido muy importante en las “Ruy López” y “Grunfeld”
Recuerdo que le gustaba trabajar por la noche, aprendí mucho con él también, cómo cambiar de direcciones, cómo sorprender al rival, era una gran persona y gran entrenador.
Recuerdo que en Sevilla, en la segunda partida encontraron una idea frente a la inglesa con un “e3” que era novedad; Kasparov encontró después de pensar una hora, y encontró una respuesta magnífica, pero quedó apurado de tiempo y perdió. En ese match llegamos a la partida 24 con una ventaja de un punto. Kasparov no tenía nada en plan teórico, nada para sorprender a Karpov. Funcionó la preparación de “Caro Kann” con piezas negras contra “e4” y contra “d4”, una variante que ofrecí yo del “Gambito de Dama” que se llama variante Ubilava, y no podían refutar esa línea. Sin embargo la última partida en plan psicológico fue muy dura. Parecía un estadio de fútbol, lleno de gente. Karpov solo necesitaba las tablas. Se jugó una apertura “Reti” y Karpov se apuró mucho de tiempo.
La partida quedó aplazada y analizamos toda la noche y era muy difícil de defender la posición. Karpov mismo dijo que había muy pocas chances de salvar la partida. Y finalmente ganó Kasparov. Se trataba de dos genios.
Karpov era muy reservado, era un jugador de blitz fantástico, si en diez partidas le ganabas una estaba bien. Recuerdo una partida del campeonato soviético, Petrosián estaba analizando contra Rashkovsky y decía que la posición estaba igualada. Pasó Karpov y con una mirada solo le dijo, “Tigran aquí estas totalmente acabado”, y le refutó todo lo que había visto Petrosián, en ese sentido me recuerda a Capablanca. Era un intérprete fantástico, el necesitaba una idea y de inmediato trabajaba y perfeccionaba esa idea, podía perfeccionar los análisis sentado jugando la partida.
Es una lástima que no se haya jugado el match Karpov contra Fischer, creo que pudo haber sido uno de los mejores matches de la historia.
- Me gustaría finalmente que me hable de dos grandes de la historia del ajedrez, Bobby Fischer y Judith Polgar
Sobre Bobby Fischer es a mí entender el mejor jugador de la historia. Su contribución al ajedrez es enorme no solo dentro del tablero sino también fuera de él. Creo que no habrá nadie con ese carisma que tenía él. Es muy injusto que mucha gente piense que era un hombre muy molesto. Él ha dado todo por este deporte y lo ha puesto en una altura que nadie había logrado. En ese match en plena guerra fría contra toda la escuela soviética. A mi juicio era un genio que dominaba todos los aspectos del juego. Creo que su técnica es inmejorable. Aquel increíble final contra Taimanov, las novedades en las aperturas en su match contra Spassky, su medio juego, además de su increíble personalidad. Creo que era el mejor. Hay muchos otros genios pero creo que el merece el número uno.
Judith Polgar creo que ha cambiado la percepción de las mujeres dentro del ajedrez. Ella jugaba muy bien, era muy fuerte y luchaba con éxito contra los mejores jugadores. Me gustaba mucho su ajedrez y como persona creo que también es una persona extraordinaria. Es un ejemplo para todos y sobre todo para el mundo de las mujeres por su fuerza de voluntad y coraje. Creo que también es difícil que se repita otra Judith.
- Dígame tres partidas a lo largo de la historia a un jugador medio. Una para aprender sobre aperturas, una de medio juego y una para aprender sobre finales.
La primera diría la partida número 14 del match entre Botvinnik vs. Petrosián en 1963.
La segunda la partida 24 del match entre Kasparov y Karpov en 1985.
Finalmente la última partida del match, la número 34 entre Alekhine y Capablanca en 1927.
- ¿Si pudiera organizar una cena esta noche con cinco personalidades del ajedrez, quienes estarían?
Estarían Lasker, Capablanca, Keres, Fischer y Gligorich. Elegiría a esos cinco.
- No habiendo elegido el camino músico como querían sus padres, cuénteme sus músicos predilectos.
Debo decir que me gusta todo tipo de música.
Me encantan los Cantos Georgianos, son muy polifónicos e increíblemente profundos.
Sobre todo un solista que ya no está hace años, Hamlet Gonashvili, es emocionante escuchar su voz.
- ¿Una película en la historia del cine?
No es fácil solo hablar de una, porque son muchas. Hay una película que ha hecho Babluani un cineasta georgiano, que se llama “Hermano”. La he visto de joven y recuerdo que las ideas que aparecen ahí me impactaron mucho. De las conocidas podría decir “El padrino” o muchas otras.
- ¿Una pintura universal con el que se emocione especialmente?
Me emocioné mucho cuando vi “El grito” de Munch. Pero en general siempre me gustaron mucho las pinturas de Rembrandt y Goya.
- Hablemos un poco de literatura. ¿Entre tantos libros de ajedrez que han pasado por sus manos, qué autores y libros de la literatura universal lo han marcado?
Nombraría dos autores y dos libros. “La guerra y la paz” de León Tolstoi, debo haberlo leído cuarenta o cincuenta veces.
De Fiodor Dostoievski “Crimen y castigo” que también leí muchísimas veces.
Ambos libros han tenido mucho impacto en mi espiritualidad.
- Alguna vez se planteó dejar el ajedrez o pensó que sería de su vida si hubiera tomado otro camino.
Con dieciséis años me interesé muchísimo en la filosofía. Perdí el interés en el ajedrez y empecé a estudiar muchos libros sobre la historia de la filosofía, realicé posgrados en la universidad y seguí trabajando para hacer el doctorado.
Pero el amor por el ajedrez ha vuelto con más fuerza y dejé todo para seguir jugando y trabajando en el ajedrez.
- Un momento preciso de su vida al que le gustaría volver
Si pudiera elegiría volver a mi juventud… iría al año 1995 al match entre Kasparov y Anand que se jugó en New York en una de las Torres Gemelas, para poder cambiar las cosas.
- ¿Cómo describiría el ajedrez?
No creo que haya que definir el ajedrez, es una actividad que tiene mucho carisma. ¡Es un juego noble!
Recuerdo como me produjo una gran impresión posicional la partida Ubilava-Timoshenko Urss 1974.